Isabel Díaz Ayuso ha ofrecido este martes su tradicional mensaje a los madrileños con motivo del final de año. En esta ocasión, la presidenta de la Comunidad de Madrid ha elegido como escenario de su discurso la unidad de atención especializada a enfermos de esclerosis lateral amiotrófica (ELA) que se puso en funcionamiento la pasada primavera en el hospital Enfermera Isabel Zendal. Desde las instalaciones por las que ya han pasado más de un centenar de pacientes, la jefa del Ejecutivo ha augurado un 2025 con «muchos desafíos» e incluso «amenazas» para una región que ha tildado como modelo por su «enorme responsabilidad» como capital de España.
La dirigente madrileña ha comenzado su mensaje refiriéndose a las personas que sufren ELA y los sanitarios que les atienden en el centro de Valdebebas «con grandísima vocación». «Tienen que saber que estamos con ellas y con sus familias», ha dirigido a los pacientes, «cada una de sus vidas nos importa y merece toda nuestra atención», ha agregado.
Igualmente ha tenido un recuerdo para las víctimas de la DANA de finales de octubre y para los más de 700 empleados públicos de la región que se desplazaron a la Comunidad Valenciana tras la emergencia. A uno lo ha citado con nombre y apellidos: Juan Carlos Jimeno, un conductor de autobús que sufrió un infarto «después de varios días de intenso trabajo». «Afortunadamente, hoy está en su casa, en Parla, recuperado», ha celebrado Díaz Ayuso.
No ha sido el único protagonista del discurso: ha habido menciones para Javier del Campo, un bombero madrileño que fuera de servicio logró revertir una parada cardiaca «en una situación extremadamente difícil» con riesgo para su propia vida; y para la doctora Carmen Pallás, jefa de Neonatología del 12 de Octubre, que junto a su equipo salvó la vida a un recién nacido que abandonaron dentro de una bolsa en un portal de Carabanchel. «El bebé encontró a una familia de acogida para adopción con la que pasará hoy su primera Nochevieja», ha celebrado Díaz Ayuso.
Por el mensaje de la presidenta, de unos 12 minutos de duración, ha habido un extenso agradecimiento por la labor que cada día desarrolla el personal sanitario, las fuerzas y cuerpos de seguridad, los bomberos, los docentes… También ha habido un recuerdo para los empresarios, los autónomos, los comerciantes, los artistas, las familias o los madrileños en general, entre muchos otros colectivos y profesiones. «Cada historia personal nos recuerda que es mucho lo que debemos celebrar y mucho lo que defender«, ha subrayado.
La jefa del Ejecutivo madrileña también ha mencionado al rey para propiciar «la unión de todos los españoles» y para agradecerle que ejerce «la mejor representación posible cuando más la necesitamos», un reconocimiento que ha hecho extensivo a la Corona. «Madrid y España le debemos desde el Prado a la Transición», ha aseverado.
Pese a lo emotivo de su primera parte, el discurso no ha estado exento de carga política. Díaz Ayuso ha subrayado que Madrid soporta «la enorme responsabilidad» de ser región capital, lo que a la vez es «una riqueza» para el país. «Sería suicida privar a cada español de un activo que ha costado siglos y que resuena en el mundo entero», ha señalado. La presidenta ha aseverado que a la comunidad se le «exige mucho» y la ha situado bajo un escrutinio constante. «Todos los ojos nos miran: los de quienes nos admiran por el mundo entero y también los de quienes menos la quieren», ha lanzado.
La presidenta se ha referido a un Madrid que «no se acostumbra, ni cede, ante la indignidad y el abuso» y que tiene por delante «muchos desafíos, incluso amenazas». «El reto de la energía, sin la que nuestros proyectos industriales y digitales no serán posibles», ha enfatizado, para citar también la «preservación» de las competencias propias -frente al Gobierno central, según se ha sobreentendido, porque en ningún momento del mensaje lo ha mencionado-; y la «defensa» de la unidad de España, la Constitución, el Estado de derecho o la independencia del Poder Judicial, entre otros cometidos.
«Mi compromiso y el de mi Gobierno es estar a la altura de esta Comunidad de Madrid que cada año sorprende y mejora», ha remarcado Díaz Ayuso, que ha insistido en que la región «deber ser siempre ejemplo de estabilidad, seguridad en las calles y seguridad jurídica». «Es nuestro orgullo y nuestro deber para con España entera ser la región más solvente», ha lanzado, antes de despedirse felicitando el año nuevo y destacando que Madrid «gusta en el mundo, sirve bien a España y defiende vivir con muchas ganas».