
María Teresa Campos ingresó, en la mañana de ayer, en la Fundación Jiménez Díaz, por un cuadro de insuficiencia respiratoria aguda, tal y como anunció el propio centro hospitalario en un comunicado que emitieron por petición de sus hijas Terelu Campos y Carmen Borrego. También destacaron que el pronóstico era reservado dentro de la gravedad. Algo que ha cambiado en las últimas horas.
En un nuevo escrito, el hospital ha actualizado el estado de salud de la presentadora. «María Teresa Campos Luque continúa ingresada y su situación clínica ha empeorado en las últimas horas, siendo actualmente muy grave». Como sucedió en el primer parte médico que compartieron, han deslizado que «este comunicado se emite a petición de Dña. Terelu Campos y Dña. Carmen Borrego, hijas de la paciente, a las que se le hace entrega».
Kike Calleja, amigo íntimo del clan Campos, ha explicado, esta misma mañana, que estas horas son de vital importancia en la evolución de la presentadora. «Ahora mismo, por lo que sé, hay poca. Están dándole un tratamiento y están viendo a ver cómo reacciona», aseguraba en ‘El programa del verano’. Además, ha dicho que «está en planta, está tranquila, rodeada de toda su familia, los médicos pendientes de ella y, como te digo, esperando a ver si evoluciona ese tratamiento que le están suministrando en todo momento». También ha aprovechado para desmentir que María Teresa esté sedada.